—Hola— Le dijo Vera a su vecina Juana.
—Hola, ¿como te va?— Respondió Juana.
— Bien, ¿Sabe que son las letras de ese árbol?— le preguntó.
— No y vos?— respondió.
— Yo si, empezó todo hace unos meses, exactamente cinco, cuando Yolanda la quiosquera, conoció a un hombre Galés llamado Ken Bale.
Fue como un amor a primera vista y como se suponía, ella le declararía su amor. A el, por su parte, le sucedía lo mismo con ella y aceptó empezar a conocerse mas y a salir juntos.
Hasta que un día de primavera, Ken le propuso casamiento y Yolanda aceptó.
A los pocos días le ofrecieron a Ken Bale Trabajo en Alemania en diferentes campos donde habitan personas y necesitan protección y, como andaban cortos de dinero, él aceptó y el 6 de Marzo partió hacia el lugar.
Yolanda le prometió que para su vuelta a la Argentina, le tendría una sorpresa, pero esto no pudo ser posible, ya que se entero de que su marido había fallecido en un accidente automovilístico. En ese entonces Yolanda no tenia mas razón de vivir, así que se preguntaba que iba a ser de su vida y conoció a un hombre llamado Kevin que era era una persona bella pero ella no iba a tener suerte con el por que era casado y con 4 hijos y Yolanda buscaba a uno joven y que no halla tenido hijos. Por este motivo se suicido, pero antes dejò las iniciales de ella y de su amor encerradas en un corazón en este árbol.
—¡ Que historia interesante!— dijo Juana.
— Verdad que si — respondió Vera.
Mientras dos personas venían caminando y se sentaron bajo el árbol a tomar unos mates y a comer algo. Y desde lejos se escuchó:
— Mi amor ¿te acuerdas cuando escribí esto?
— Claro que sì— Respondió Ken Bale.
Mientras seguía la charla, Juana se fue corriendo y gritando que creía haber visto gente muerta.
